Ozoria afirma que muchos mueren por covid y no se dice
Iglesia pide a los fieles acudir a vacunarse para frenar la pandemia que amenaza la salud de los dominicanos.
El arzobispo metropolitano de Santo Domingo, Francisco Ozoria, aseguró ayer que en el país muchas personas están muriendo de covid-19 y que no se está diciendo.
Monseñor Ozoria, que encabezó la eucaristía por la celebración de Corpus Christi en la iglesia Santa Bárbara de forma sorpresiva, pidió a los fieles continuar orando por la situación sanitaria que amenaza la salud de la gente, así como por el eterno descanso de los que han fallecido a causa del virus.
“Aunque no se diga mucho, yo no sé si no se quiere decir, pero se está muriendo mucha gente por covid”, afirmó Francisco Ozoria.
Mientras que el párroco Milcíades Florentino, de la iglesia Santa Bárbara, pidió a los feligreses que se vacunen para terminar con la pandemia.
“A los fieles a vacunarse y que no haya ni un solo ignorante entre nosotros que le ande huyendo a la vacuna porque lo que está haciendo es daño a sí mismo y a los demás”, enfatizó Florentino.
Fieles acuden a la iglesia bajo protocolo
Decenas de fieles católicos acudieron ayer a diferentes iglesias de la ciudad por la celebración de Corpus Christi bajo estricto protocolo por el avance del coronavirus en el país.
Los feligreses entonando alabanzas, y adoptando la restricción de dos personas por asiento y utilizando mascarillas festejaron la ocasión religiosa.
Algunos de los ciudadanos dieron el “abrazo de paz” con los puños, mientras que otros, abrieron los brazos simulando un abrazo para aquellos que estaban sentados a lo lejos.
“No hay cristiano que no se sienta feliz por recibir el cuerpo y la sangre de Cristo’’, expresó Santa Brito, una devota.
Tal escenario se visualizó en la iglesia de Santa Bárbara y en la Catedral Primada de América.
En la Catedral Primada de América la homilía inició a las 11:00 de la mañana bajo las medidas sanitarias de lugar.
En los bancos había letreros que indicaban el límite de personas permitido por los asientos, mientras que en la entrada una persona colocaba alcohol en las manos de los visitantes.
A las 11:00 de la mañana el grupo de adoración inició su servicio mientras los feligreses llegaban al lugar. “Este es un día especial en que celebramos el Cuerpo de Cristo. Sin importar la pandemia siempre vengo a la iglesia cuidándome siempre, pero sin faltar a mi fe”, dijo Juana Hungría. La homilía en la catedral la presidió el obispo emérito de la ciudad de Rodrigo en España, Raúl Berzosa.